El
pasado sábado, día 8 de junio, se celebró la boda de la princesa Magdalena con Christopher O’Neill, la
menor de los 3 hijos de los reyes de Suecia, y la cuarta en el orden de
sucesión al trono.
Al
enlace, acudieron aproximadamente unos 600 invitados, entre los que se
encontraban miembros de familias reales, y miembros de la alta sociedad, tanto americana como europea.
La
ceremonia tuvo lugar en la capilla del Palacio Real, y posteriormente se
desplazaron al palacio de Drottningholm, donde se celebró el banquete, lugar
donde hace 31 años nació la princesa y residencia de la Familia Real.
La
novia hizo su entrada del brazo derecho de su padre (los señores siempre
ofrecerán el brazo derecho a las señoras).
La
colocación en la iglesia, está marcada por el Evangelio, y se establecen la
derecha y la izquierda en función de este. Por este motivo, la novia, que ocupa
el lugar de honor, fue la situada a la derecha, mientras que el novio se colocó
a la izquierda.
En
función de este criterio, fueron ordenadas el resto de zonas.
En el
altar, en la parte derecha, se colocó la corona de la princesa Hedvig Elisabeth
Charlotta de 1778, como viene siendo tradición, sobre un almohadón de
terciopelo de la boda del rey Gustavo IV Adolfo.
Tras
finalizar la ceremonia, los novios salieron de la capilla, la princesa del
brazo derecho de su ya marido.
Después
de la ceremonia, los novios dieron un paseo en carruaje, para poder saludar a
la multitud de personas que acudieron para compartir este gran evento.
Tras
el paseo, se trasladaron en barco, al lugar donde tuvo lugar el banquete
nupcial, al palacio Drottningholm, residencia oficial de la Familia Real.
La
princesa escogió un romántico diseño de Valentino, y lució una tiara de su
colección personal.
El
velo, de organza con bordado de encaje, es una herencia familiar de la reina
Sofía, que lucieron tanto la princesa Sibylla (madre del rey Carlos XVI
Gustavo), las princesas Desirée, Margarita y Cristina (hermanas del rey), la
reina Silvia y la princesa Victoria.
Princesa Margarita |
Princesa Cristina |
Reina Silvia |
Princesa Victoria |
El
ramo de flores, como es tradición, estaba compuesto por flores de jardín,
concretamente rosas blancas y flores de mirto.
El
mirto ha tenido mucha presencia en la familia. La princesa Margarita y la reina
Silvia, adornaron sus tiaras con hojas de mirto de Sofiero, en honor al árbol
que plantó la abuela paterna del Rey. La princesa Magdalena, también adornó su tiara con flores y su
cabello con una ramita de mirto.
La
etiqueta marcada para la ocasión, fue el frac o uniforme para los señores, y
traje largo o de gala para las señoras, como viene siendo tradición, y que ya
pudimos ver en el enlace de la heredera, la princesa Victoria.
Dentro
de las invitadas, había para todos los gustos… Os dejo un resumen
Luis Medina Abascal, el único español presente, publicó en su perfil de twitter la invitación que a continuación os muestro:
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